¿Son seguros los parques infantiles de las ciudades?

Un artículo reciente del ABC que Urbadep ya destacó en varios artículos hace años.

Para los niños los parques infantiles de las ciudades son sus lugares predilectos. Jugar al aire libre, con los amigos, en toboganes, balancines por donde subir, bajar y balancearse… Son su espacio de socialización, donde además los padres pueden compartir conversaciones con otros adultos. Zonas donde desarrollar la creatividad, la imaginación, la destreza y la fortaleza psicológica, cognitiva y emocional. Pero también un espacio en el que educarse, donde aprender a esperar el turno, a respetar al otro, a jugar en equipo…

Tanto tiempo pasan los niños en los parques infantiles que cabe preguntarse si estos son seguros para ellos. » Sí, son todo lo seguro que pueden ser porque para los fabricantes la seguridad es un asunto prioritario. No instalan ni fabrican nada que no esté de acuerdo a la normativa», responde Javier Yoller, presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Mobiliario Urbano y Parques Infantiles (Afamour). Esa normativa consiste en toda una serie de requisitos que exige Europa y que deben cumplir los parques infantiles: se trata de las normas EN-1176 sobre los equipos y EN-1177 sobre los pavimentos, ambas actualizadas en 2008.

No es obligatoria Pero si bien se trata de una normativa «muy elaborada», como explica Yoller, no es de obligado cumplimiento. «Son normas técnicas de aplicación voluntaria, salvo que los países y las Comunidades Autónomas obliguen a ello, a través de una ley que establezca un régimen sancionador para quien lo incumpla», dice el presidente de Afamour. Los ayuntamientos son los responsables de los parques, de revisar las instalaciones, de comprobar que están conformes a la normativa y de hacer un mantenimiento.

El 70% de los accidentes en los parques es a causa de caídas Hay tres cuestiones clave en las que se hace más hincapié para evitar accidentes: las medidas de protección anticaídas (barandillas, suelo que amortigüe…) es una de cuestiones más importantes a las que se presta más atención, pues el 70% de los accidentes en los parques se producen por caídas. Los atrapamientos y las fijaciones y estabilización de las estructuras son los otros asuntos. Pero muchas veces los accidentes son por un mal uso que se hace de estas instalaciones. «Bien por desconocimiento o por comodidad de los padres», asegura Yoller. «Cuando hay un escalón de 40 centímetros es para que un niño menor de tres años no suba, o una barra de bomberos es para niños de cinco años no de dos años. Hay limitaciones que no se cumplen. El parque infantil no es una guardería, porque el parque no cuida de un niño que esté solo sin su padre».

Así debe ser un parque infantil 10:

1. Los juegos y elementos de mobiliario urbano tienen que estar realizados con materiales y tratamientos no tóxicos ni conductores de electricidad.

2. Los elementos metálicos deben tener protección anticorrosión. L as maderas tratadas y los plásticos constituyen los materiales más habituales, y se seleccionan pavimentos que amortiguan los golpes y caídas.

3. Los parques infantiles deben estar realizados con materiales de alta calidad que aportan gran resistencia frente al vandalismo y la climatología adversa.

4. Tienen que ser resistentes, estables y con estructuras seguras, con cimentaciones y anclajes comprobados; con barreras y protecciones anti-caídas en zonas de altura. Además, su diseño debe evitar atrapamientos de dedos, cabeza y cuerpo.

5. Las estructuras de juego no pueden tener aristas, bordes cortantes y salientes peligrosos; ni astillas y restos que puedan causar daños.

6. Cada juego tiene que contar con una zona de seguridad que evite choques entre usuarios de juegos próximos y lesiones en caso de caídas.

7. Deben crearse accesos limitados para los niños pequeños si el juego no es apropiado para los más peques, y zonas de seguridad en cada elemento (mínimo 150 cm) con recubrimiento de seguridad amortiguador (arena, gravilla o suelos sintéticos) en función de la altura de caída.

8. En la señalización deben ser visibles la edades de uso y la información sobre el titular del parque y los teléfonos de reparaciones y emergencias. Asimismo, se advertirá e impedirá la entrada de animales.

9. Las áreas infantiles, por otra parte, deben estar a más de 30 metros del tráfico rodado o su perímetro estará vallado con medios naturales o artificiales para que los niños no accedan a la calzada con facilidad.

10. Su diseño debe adaptarse a usuarios con dificultades de movilidad, evitando escalones, bordillos y pavimentos inapropiados para sillas de ruedas.

11. Es importantísimo un correcto mantenimiento. «Es un derecho de salud pública que en estas áreas haya mantenimiento y limpieza para prevenir accidentes y enfermedades en la población infantil», explica Afamour. Con un mantenimiento periódico, los equipos se encontrarán en buen estado. Aumentará su vida útil, pero sobre todo la seguridad de los usuarios.

Alerta Afamour que un equipo conforme en origen podría dejar de serlo de no contar con un correcto mantenimiento.

12. Los parques no deben olvidar a las personas mayores, e incluir entre su equipamiento mobiliario urbano, como bancos para sentarse, fuentes, papeleras, etc.

Scroll al inicio